Huelga decir que Telecinco ofreció un contrato multimillonario a Sara Carbonero por conjugar dos aspectos: belleza y profesionalidad. Y no por ser novia de Casillas.
Y tampoco hace falta recordar que a Urbaneja, el que dice ser el portavoz de los periodistas madrileños, le gusta regresar, de vez en cuando, a la primera línea del fuego mediático. En esta ocasión, a costa de la periodista toledana.
Parece mentira que un profesional veterano pretenda hacer creer a los ciudadanos que la FIFA permite a los periodistas situarse donde les apetece. En el caso de Sara, detrás de la portería defendida por Casillas. ¿Quién se lo cree? Si la FIFA es una mafia. Ahí, para entrar, debes aflojar la billetera. Y ya dentro, moverse lo justo.
Me da vergüenza que una asociación profesional invierta su tiempo en verter acusaciones (apuesto que falsas) en lugar de defender a los periodistas que sufren las mezquinas maniobras de las empresas. Que se enfrenten, que motivos tendrán, con Telecinco (y el resto de medios) por otros asuntos, eso sí, menos rimbombantes.
Y tampoco hace falta recordar que a Urbaneja, el que dice ser el portavoz de los periodistas madrileños, le gusta regresar, de vez en cuando, a la primera línea del fuego mediático. En esta ocasión, a costa de la periodista toledana.
Parece mentira que un profesional veterano pretenda hacer creer a los ciudadanos que la FIFA permite a los periodistas situarse donde les apetece. En el caso de Sara, detrás de la portería defendida por Casillas. ¿Quién se lo cree? Si la FIFA es una mafia. Ahí, para entrar, debes aflojar la billetera. Y ya dentro, moverse lo justo.
Me da vergüenza que una asociación profesional invierta su tiempo en verter acusaciones (apuesto que falsas) en lugar de defender a los periodistas que sufren las mezquinas maniobras de las empresas. Que se enfrenten, que motivos tendrán, con Telecinco (y el resto de medios) por otros asuntos, eso sí, menos rimbombantes.
Si la cadena de Fuencarral utiliza, o no, a Sara Carbonero en sus retransmisiones del Mudial no dejaría de ser una anécdota en el actual espectro mediático. Una cuestión menor.
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