La sensatez no ha muerto. ¡Viva la sensatez!

El globo sonda había llegado a la calle, y la respuesta ha sido casi unánime: Las mascletás son patrimonio de Luceros. Y de ahí no se mueven.

Todo surgió unos meses atrás, y cogió más fuerza hace un par de semanas con la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, como protagonista de una entrevista en el Diario Información dentro del Especial de Hogueras.

¿Qué otros aspectos cree que se pueden mejorar de las Hogueras?
Es necesario acometer el cambio de ubicación de la mascletà. Es necesario un lugar que tenga una mayor cabida para la gente, que ofrezca mayor comodidad a la hora de acudir y también que sea seguro. Yo creo que la nueva ubicación puede ser una realidad para el año que viene, si se empieza a trabajar nada más acabar estas Hogueras.

Enseguida se habló del Puerto de Alicante, en las instalaciones de la Volvo, que -según parece- valen para todo. Sin embargo, esta propuesta nunca ha contado con el necesario apoyo popular. Más bien, todo lo contrario. Allí cabría más gente, sí; habría más seguridad, también; ¿mayor comodidad para asistir?, me extraña, dado que está mucho más alejado del núcleo urbano y comercial y el caos en el tráfico sería tan imponente como el actual…

Pero, ¿dónde queda la tradición? En Alicante ya pasamos por una experiencia similar cuando se trasladó la mascletà –las obras mandaban– a la zona de Campoamor. El resultado fue un fracaso rotundo. Un antecedente inmejorable para no tocar la actual ubicación.

Y más aún. ¿Qué pasa con la magnífica acústica de Luceros? Ya quisieran nuestros vecinos del norte tener en su Plaza del Ayuntamiento una resonancia como la de aquí…

Parece ser que el afán de cambiarlo todo se ha aparcado definitivamente. Ayer, Castedo descartó trasladar el Concurso Pirotécnico de Luceros a la zona de la Volvo porque «se perdería la mascletà. Es un debate absurdo porque en Luceros funciona magníficamente». Un debate absurdo, tal vez, pero un debate que generó ella. Tras la penúltima mascletà, para enmendar el error, aclaró que cuando comentó que debería abordarse el cambio de ubicación de las mascletás lo hizo «sólo pensando en la seguridad, pero con las medidas necesarias lo mejor es dispararla aquí, sin ninguna duda». Por tanto, el traslado a esa ubicación, según palabras de la máxima responsable municipal, es «inviable». Escrito queda. El tiempo, y los caprichos pasajeros, dictarán la definitiva sentencia.