Las familias, culpables del paro andaluz

“Hay un fenómeno que estamos viviendo en las oficinas, que por cada persona que pierde el desempleo se generan tres inscripciones más, el efecto, en fin, solidaridad, o efecto familia. Por ejemplo, cuando un hombre del sector de la construcción pierde el empleo, la respuesta en casa es 'vamos a ir todos' y apuntan también la mujer y el hijo si es mayor de edad. Y ese fenómeno está ocurriendo”. Estas palabras han salido esta mañana de la boca del consejero de Empleo andaluz, Antonio Fernández, durante una reunión con representantes de la Confederación Granadina de Empresarios. Eso sí, se desconoce si la idea ha pasado, previamente, por la cabeza del citado representante autonómico. Es mucho suponer, por supuesto.

Esta reflexión, de gran calado, podría sonar a una justificación de las cifras del paro en Andalucía. Pero sólo si malpensamos. Si nos limitáramos a escuchar la insólita frase, sin más, no quedan más que dos alternativas: O te descojonas o te encabronas (si tienes la desgracia de engrosar las malditas listas sin ningún espíritu solidario). Y todo por un bocazas. Un político más.